12 ene 2010

Yo también puedo ser tu sombra


Me encontré con el chico de las pestañas eternas sentado en esos escalones de piedra que han hecho en el río. Esos que siempre están fríos, más en estos días de invierno. No había ni un alma y es que, realmente, ¿a quien se le ocurre ir a pasar las horas muertas al lugar más frío de toda la ciudad? Suspiré al verle allí, aunque solo distinguiera su espalda que de tanto espiarle por los pasillos ya me la se de memoria. Por ahora no he hablado mucho del chico de las pestañas eternas, pero, a medida que pase el tiempo y me decida por hacerle un huequito más grande en mi vida, os daréis cuenta de que es una persona un tanto... especial. Realmente, ni siquiera puedo asegurar al 100% que sea una persona.
El caso es que me lo encontré allí mirando como fluía la corriente del río, viéndola llevarse las horas que le sobraban. Sonreía con esa cara de idiota que se le pone cuando está recordando algo que le gustó vivir. Como en esos casos no le gusta que le hablen, decidí dejarme caer a su lado como quien no quiere la cosa.
Tardó un rato en mirarme, en preocuparse por quien se había entado a su lado. Me encogí de hombros y él volvió a mirar el río.
-Una vez...-comenzó.-...una vez conocí a una chica...
Al chico de las pestañas hay que dejarle empezar la conversación siempre. Él es así. Si no, corres el riesgo de que no le apetezca hablar y te escupa fuego con su lengua de serpiente. El chico de las pestañas puede ser muy malo a veces.
-¿Tan fantástica como yo?-sonreí.
Me miró, arrugando la nariz.
-Era todo lo contrario a ti.
-Ahh...- como ya he dicho, él es taaaan amable...- Venga, cuéntame.
Y se le iluminaron los ojos. A mi, por iluminarle los ojos, me pueden pedir un cielo, que lo doi sin problemas.
-Fue cuando estaba en Estados Unidos...-comenzó.- En aquel instituto...Tenias que haberla visto, ¡tenías que haberla visto! Era la típica chica rubia de las películas americanas, la que les tiene a todos en la palma de su mano... Yo no podía dejar de mirarla. La veía sonreír y moverse como una gata. ¡Tenía ojos de gata! Esa mirada de: "si yo quisiera iba a comerte enterito, chavalín". Pero nunca quieren. Las chicas con mirada de gata nunca quieren comerte entero. Piensas: "joder, no voy a ser yo". Eso pensé yo cuando ella se acercaba. Eso pensé yo cuando me sonrió, cuando la tenía justo delante de mi, mirándome con esos ojos... Me dio la sensación de que ya había empezado a comerme antes de que yo me diera cuenta. El caso es que estamos allí, de pie en mitad del pasillo. Dijo algo que ni entendí, claro, solo podía sonreír como un imbécil... Arrancó una hoja de su cuaderno y garabateó algo..Después me lo dio. Me lo dio a mí, joder, a mi. Sentía que el corazón me iba a estallar. Es la clase de chicas que son el mejor polvo de tu vida, ¿sabes? ¡El mejor! El caso es que me da el papel y veo escritos unos números. ¿Era su número de móvil? Debajo, con esa letra redondita que tenéis todas las tías había escrito algo como "llámame cuando quieras, que me apetece ser un rato tu sombra". Y yo allí, de pie, aspirando su perfume mientras ella se iba. ¿Te lo imaginas? Aquella era una situación ya no de película, sino de libro... 
-¿Y luego?
-¿Luego, qué?
-¡Cuando la llamaste! ¿Cuándo va a hacer? Era de esas que te bajan los pantalones en el baño del cine y te sacan todo lo que no quieres tener dentro, ¿a que si?
Me miró de nuevo, sonriendo.
-No se. No llegué a llamarla.
-¿QUÉ? Después de todo lo que me has soltado... ¿no la llamaste? ¿Qué pasó? ¿Te entró miedo de tanta perfección o qué?
-No, nada de eso...
-¿Entonces?
-Ella...ella era todo lo contrario.
-¿Todo lo contrario que yo?
-Si... Eso la convirtió en todo lo contrario de lo que yo necesitaba.
Volvió a mirar al río, sin borrar aquella sonrisa inexplicable de su cara. Yo no sabía que hacer. El chico de las pestañas eternas tiene ese extraño poder.
Finalmente cogí una piedra y la tiré haciendo onditas en el agua.
-Mejor- respondí.- Seguro que a mi se me da mejor que a esa ser tu sombra.

8 comentarios:

  1. . . . Me ha encantado! Escribes de maravilla, enserio :)

    Un beso Francés!!

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  2. Conocer a las personas en su luz y sombra es muy interesante

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  3. Me gusta. No te sabría decir porqué, pero así es ^^

    Creo que el chico de las pestañas eternas y yo nos vamos a llevar bien ;)

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  4. Yo también quiero tener un chico de pestañas así.

    Beso :)

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  5. Me encanta lo de ser todo lo contrario de lo que necesitas. La Teoría de los polos opuestos a hacer puñetas.

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  6. Serías mil veces mejor, estoy segura de ello.

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Grita un poquitín más alto...

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